El dia 20 de diciembre de 2000 los nacionalistas vascos de ETA asesinaron a tiros al Guardia Urbano de Barcelona, Juan Miguel Gervilla Valladolid.
Lo asesinaron esos mismos mafiosos con que los comunistas y nacionalistas vascos firmaron -y aún mantienen- el Pacto de Lizarra para romper nuestra Constitución, una Constitución que -no lo olvidemos- fue votada por la inmensa mayoria de los vascos y del resto de los españoles.
Lo asesinaron esos mismos cobardes a los que los demócratas tratamos de aislar con la vergonzosa y minoritaria excepción de comunistas, nacionalistas vascos, nacionalistas catalanes y nacionalistas gallegos.
Sobre las siete y media de la mañana el Guardia Urbano Juan Miguel Gervilla estaba regulando el trafico en la confluencia de la Avenida Diagonal con la calle Numancia de Barcelona, cuando observó que dos individuos jóvenes empujaban un Fiat Uno color rojo con las intermitentes de emergencia conectadas. Inmediatamente se dirigió a ellos para prestarles ayuda y sin mediar palabra le dispararon dos tiros, uno en el pecho y otro en la cabeza. Juan Miguel murió en el acto