Terrorismo de E.T.A.

El Guardia Civil Mario Leal Baquero, natural de Pontevedra, de 29 años de edad, casado y padre de una hija.

A la una y quince de la madrugada del viernes 6 de diciembre de 1985, Cuando Mario Leal (llevaba dos años destinado en el Puesto de Arechavaleta) se encontraba en el interior de un turismo aparcado en las proximidades del Ambulatorio de la Seguridad Social, de la localidad guipuzcoana de Mondragón, cerca de la vieja estación de ferrocarril, se le acercaron dos individuos pertenecientes al «comando Bellotxa» de la banda terrorista ETA, y dispararon repetidamente sobre el agente. Huyendo a continuación hacia Vitoria en un vehiculo en el que les aguardaba una tercera persona.

Los facultativos del centro médico, al escuchar los disparos (una decena) salieron encontrando el cuerpo sin vida del Guardia Civil en el interior del vehiculo.

Antonio Mateo Melero, Cabo Primero de la Guardia Civil, natural de la localidad de Vejer de la Frontera (Cadiz), de 32 años de edad, casado; fallece en Villafranca de Ordicia (Guipúzcoa), como consecuencia de los disparos efectuados (entre tres y cinco tiros en la cabeza) por un hombre y una mujer de ETA, a las veinte horas y treinta minutos del domingo 1 de noviembre de 1987, cuando salia de un establecimiento hostelero, tras tomar unas consumaciones, junto con su esposa natural de Ordicia donde sus padres regentaban un bar, varios familiares y unos amigos.

Trasladado al Hospital Comarcal de Zumarraga, ingresó cadaver.

Los agresores tras cometer el asesinato huyeron, en una furgoneta, robada con anterioridad, ocupada por otros miembros de la banda armada que le estaban esperando.

El Subteniente de la Guardia Civil, don Cristóbal Martin Luengo, natural de la localidad de Valderrodrigo (Salamanca), casado y padre de 3 hijos, de 50 años de edad; fallece el martes 8 de septiembre de 1987, a consecuencia de las heridas sufridas por los disparos efectuados por unos individuos de ETA (Félix Ignacio Esparza Luri y Juan Carlos Iglesias Chouzas, «Gadafi»); que le abordaron en el barrio de Arangoiti, en Bilbao, cuando se dirigia a su domicilio.

Tras la agresión los dos jóvenes se dieron a la fuga en un taxi robado.

La bala alcanzo de rebote a Julian Pérez Gómez, que le produjo heridas leves.